
orreciudad, Torre-Amor,
Torre-Madre y Torre-Guía.
La piedra viril y dura
se ha convertido en ternura
a las plantas de María.
Señora del nuevo día,
aurora del Pirineo.
Desde los valles te veo
como una torre de Amor.
La ciudad llegará a todos
si la torre llega a Dios.

orreciudad es la estrella
clara y bella
que conduce al peregrino.
Torreciudad
no es un alto en el camino:
porque Ella misma es camino,
vida, esperanza y verdad.

orreciudad entre breñas
tú que enseñas
a hacer de las piedras flores.
Torre-Amor
lección de claros amores.
Que once siglos son de amores
los que buscan esa flor.